viernes, 27 de enero de 2017

Búsqueda de trabajo


Tengo la mala fortuna de estar buscado trabajo, para mi desgracia soy autónoma, algo que podría ser bueno y positivo para mí se ha convertido en una pesadilla, no solo por la enorme cuota que tengo que pagar, sino también, por las dificultades a las que me enfrento cada día para encontrar nuevos clientes o simplemente para buscar trabajo como asalariada.

En el primero de los casos me encuentro con clientes que poco o nada aprecian mi trabajo, en realidad pienso que no saben exactamente a qué me dedico y cambian de decisión tan frecuentemente que donde dije digo digo Diego, me cambian los diseños, el presupuesto de forma unilateral sin llevar a cabo una nueva negociación. Me dan problemas en cuanto a las facturas, y ya no tanto por el hecho de pagarlas o no, si no por que, no entienden los procesos básicos de una factura, como el IRPF. Y cuando se lo vas a explicar para que no haya malentendidos en el futuro, se muestran distantes y poco colaborativos, a parte de proponerte cuestiones poco legales.

En otras ocasiones pretenden que les hagas el trabajo prácticamente gratis, no puedo aceptar trabajos por los cuales prácticamente no gano nada, si no que, más bien, pierdo dinero. Entiendo, y todos lo hemos hecho, aceptar trabajitos en plan inversión, para que me conozcan y vean lo bueno que soy. Vamos a ver, creo que en toda mi carrera y ya llevo unos cuantos años, solo me ha servido este planteamiento unas tres veces, una mierda de inversión vamos.

Mientras que en el segundo caso me encuentro con empresas que no entienden que es totalmente compatible ser autónoma y querer ser asalariada a la vez, me miran como si fuera un extraterrestre que les habla en un idioma desconocido. Tampoco entiendo esas empresas, tan guays ellas, que tienen grandes pantallas para hacer conferencias con el otro lado del charco y cuando les propones teletrabajar o simplemente colaborar con ellos de forma freelance y hacer las reuniones vía Skype, te miran extrañados como si no supieses de qué narices les hablas, (Skype, ¿eso qué es?).

En algunos trabajos será necesario estar en la oficina de manera presencial pero para volcar textos en una maqueta y diseñar libros, que es fundamentalmente a lo que me dedico, la verdad no veo la necesidad de estar presencialmente en ningún sitio, y gracias a dios, hay empresas que entienden esto.

Pero lo que realmente me molesta de la búsqueda de trabajo son las miles de páginas, compañías que te ayudan a buscar trabajo, ¿hay realmente alguien detrás de estas compañías preocupado por que sus usuarios encuentren el trabajo deseado o por lo menos un trabajo acorde con sus habilidades? Porque la verdad, es algo que dudo bastante. Como he dicho al principio, busco trabajo y estoy en prácticamente todas estas páginas, hay algunas que funcionan muy bien y otras que son un desastre. Te piden rellenar una serie de formularios, los cuáles odio rellenar, dónde tienes que poner tus datos personales, tus estudios, tus experiencias laborales, etc., pero luego me llegan ofertas que nada tienen que ver con la información que les he dado. O en otros casos, simplemente te mandan una serie de listados con trabajos que pueden estar relacionados con tus habilidades pero cuando pinchas en el enlace el anuncio ya no existe y lo peor de todo es que tú recibiste ese listado esa mañana y te lo indican como novedad, pero el anuncio lleva desaparecido desde hace meses. ¿Realmente hay alguien que comprueba si los anuncios están al día?, porque debería.

Cuestión a parte son los formularios, que como he dicho odio rellenar, por que no veo realmente para que sirven, ya que en la mayoría de los casos vienen informaciones prediseñadas y no viene exactamente mis conocimientos o habilidades. Así que, por qué no facilitar a todo el mundo la vida y simplemente permitir al usuario subir su currículum y portafolio (si fuese necesario) sin más, toda la información y todos los datos de contacto ya están en esos documentos.

Y no escribo esto como pataleta, si no, como un medio para avanzar tanto ellos como yo, o las personas que se encuentren en mi misma situación. Seamos todos más abiertos de mente, valoremos el trabajo que nos realizan las personas que contratamos y por favor seamos serios, si una oferta está cerrada no la envíen como si todavía tuvieses oportunidad para conseguir el puesto, por que es un tomadura de pelo y me encuentro con esta situación varias veces al día.

jueves, 26 de enero de 2017

El amor al cine de Damien Chazelle

Ayer noche fui al cine a ver la película que tantos elogios ha tenido en los últimos meses, la gran favorita de los Oscars y que en la pasada edición de los Globos de Oro consiguió siete estatuillas, sí ayer fui a ver, La la land (La ciudad de las estrellas).

Cuando lees y escuchas tanto elogios sobre una película ya vas predispuesto a ver una gran película y en muchas ocasiones ha pasado que me han defraudado, tan maravillosa era que al final no le encontraba el punto e incluso me aburrían, pero este no es el caso. Si el espectador es un amante del cine clásico, los musicales y del jazz (fundamental en esta película), le va a encantar. Es cierto que en algunos momentos el ritmo baja un poco, pero enseguida se recupera para contarnos los altibajos de Emma Stone (Mia) y Ryan Gosling (Sebastian), como actriz, músico de jazz y como pareja. 

Ya desde el momento en que la proyección comienza hay referencias al cine clásico, esa imagen de cinemascope es impagable, hacía años que no la veía en una pantalla grande. Todo en la película está perfectamente calculado para mostrar el amor al cine y al cine clásico del director Damien Chazelle. La tipografía de jazz utilizada tanto en los títulos de crédito iniciales como en los intertítulos que van anunciando la época en la que se encuentran los actores, las referencias tanto en imágenes como en películas y por supuesto las escenas de la misma película que hacen un sincero homenaje a los grandes musicales como Cantando bajo la lluvia, (solo hay que ver lo colorido del vestuario) o Broadway Melody (cuando bailan con el fondo estrellado), entre otros muchos.

La la land es una película muy bonita que disfrutarán mucho si se conocen esas referencias, pero también será todo un descubrimiento si no se conocen. Aparte de la preciosa banda sonora.

Solo comentar que hubiese preferido que los que tenía a mi alrededor no se estuviesen comiendo el bocata que se habían traído de casa para cenar o los que se estaban comiendo las patatas fritas bien untadas en ketchup (olía toda la sala). 
Puede que sea como Sebastian, el defiende a ultranza el jazz clásico, puede que yo haga lo mismo con el ritual de ir al cine. Una sala oscura, una pantalla grande y una gran historia. Pero es difícil dejarse llevar por lo que estás viendo cuando el de al lado está intentando abrir una bolsa de patatas fritas, sin mucho éxito, o se está "guasapenado"con alguien. Así no mola. De todas formas disfruté muchísimo viéndola y salí con ganas de bailar mientras volvía a casa.

miércoles, 11 de enero de 2017

Indignación

Hoy 11 de enero tenía ante mí un día tranquilo, pero se ha convertido en un día bastante complicado por circunstancias ajenas a mi persona.

Hace uno meses cuando todavía vivía en Madrid se presentó en mi casa una chica diciéndome que venía de parte del ayuntamiento de Madrid para hacer una gestión respecto al gas, meses más tarde descubrí que me había mentido y que sin mi consentimiento me había hecho cliente de Endesa. El día que me enteré no daba crédito, me sentí totalmente ninguneada en mis derechos y en mi capacidad intelectual. Yo, una persona con dos carreras, un máster, espabilada, había sido engañada por una comercial de dicha compañía. Me sigo sintiendo muy tonta y no quiero pensar que harán con personas mayores o con menos estudios. 

Tras varias llamadas durante los últimos meses del pasado año conseguí darme de baja del servicio de gas, pensaba que todo estaba solucionado. Ilusa de mí. 

Ayer, revisando mi cuenta bancaria veo un cargo de unos 64€ de parte de Endesa, les llamo para saber qué es eso y una amable señorita me hace un desglose de la factura y me dice que parte de los gastos incluidos en esos 64€ son de la distribuidora del gas de mi antigua casa (Gas Natural), que me penaliza por darme de baja del servicio de mantenimiento de la caldera, contratada hace unos 15 años por el dueño de la casa. Así que me quejo en el Twitter de la compañía, que sentido tiene penalizarme a mí si yo solo soy la inquilina que ya no vive en esa casa. Se ponen en contacto conmigo esta mañana y me dicen que eso no es así que ellos no me han cobrado ninguna penalización. O sea que la chica de Endesa que me atendió no tenía ni idea de lo que hablaba, vamos a ver que tomadura de pelo es esta. Y para colmo esta mañana recibido una llamada del servicio de mantenimiento de Endesa diciéndome que seguía siendo parte de la gran familia de Endesa, no entendía que me decía, me bloqueé, me sentía tan frustrada que me caían lagrimas.

Al rato decidí llamar de nuevo a Endesa con la mala suerte que se cortó la comunicación mientras estaba finalizando el proceso de baja y hasta hace 15 minutos (son las 20:00 de la tarde) no he podido solucionarlo por que los muy cachondos estaban realizando el mantenimiento de los servidores y no podían hacer ninguna gestión.

Vamos a ver, si tenéis que realizar una actualización, tened una grabación para estos momentos y no hagáis a la gente esperar con "si desea hablar con tal departamento, pulse 1", si ya sabéis que los asesores no pueden trabajar, no hagáis perder el tiempo a la gente, un poquito de respeto.

Por otro lado, tengo otra queja para las dos compañías del gas con las que me he enfrentado en estos últimos meses. Si un cliente llama para darse de baja de vuestros servicios de gas deberías informarle que también, si quiere, puede darse del baja del servicio de mantenimiento. Por que yo, desde mi ignorancia, pensaba la primera vez que me di de baja con Gas Natural que una vez que te das de baja, te das de baja y punto. Pues no, has de llamar al departamento correspondiente para darte de baja del servicio de mantenimiento. A ver, que cuesta informar al cliente en el momento de la baja de los servicios, habrá gente que le interese mantener ese servicio y habrá gente que no, pero no lo podéis dar por supuesto, por que claro, si os calláis os beneficiáis hasta que el cliente se de cuenta, como ha sido mi caso. Y todavía es más sangrante en el caso de Endesa, por que si ni siquiera sabía que era cliente como iba a saber que también tenía contratado el servicio de mantenimiento. En el momento que se me gestionó la baja, me lo tenían que haber comentado.

La verdad es que tras esta nefasta experiencia no puedo decir nada positivo de Endesa, me han engañado, por mucho que le hagan un expediente disciplinario a la chica, a mí me han cobrado por algo que ni quería ni iba a usar por que ya no vivo en esa casa. Las veces que me he comunicado con ellos, solo una vez de todas las llamas que he realizado, han sido sinceros y se han preocupado por mi situación y han intentado realmente ayudarme (una pena no acordarme del nombre de la chica) el resto de las veces no han sido nada comprensivos ni nada útiles. 

La idea de este blog no era quejarme precisamente de estas cuestiones, pero necesitaba dejarlo escrito, ya que gritar hijos de puta, no me ha servido de nada por que no me han oído.

domingo, 8 de enero de 2017

Patrimonio industrial de Asturias

Museo Mina de Arnao



Siempre es un buen momento para conocer nuestro pasado industrial y gracias al interés de los planes de conservación de los gobiernos y de Europa podemos hoy en día aprender y ver como eran las condiciones de trabajo de nuestros antepasados. 


En la costa de Castrillón (Asturias) se encuentra la playa de Arnao de gran importancia geológica y fue ahí precisamente donde el monje Fray Agustín Montero escribió a Felipe II allá por el 1591 para pedirle permiso para la extracción de una piedra negra (carbón). Convirtiendo así los acantilados de Arnao en la primera mina de carbón vegetal documentada en la Península Ibérica.
Con el paso del tiempo la explotación minera continuó pero no fue hasta la llegada de los belgas en el siglo XIX cuando se empieza una explotación a nivel industrial con la fundación de la Real Compañía Asturiana de Minas de Carbón por Ferrer, Riera y Lesoinne. En esos años ese construye el castillete que aún se conserva en el museo, de ladrillo y madera. Por fuera fue recubierto de zinc, lo cual permitió que el salitre no hiciera mella en él. 

El museo mina de Arnao, está compuesto por un centro de interpretación con maquetas y textos explicativos de cómo se fundó la mina, de los dueños, de la vida de los mineros y de todo el engranaje industrial que se creó a su alrededor. También se puede realizar una visita guiada por la mina y sus galerías.
Es una visita muy interesante, muy bien explicada y entretenida para todos los públicos y de gran interés histórico, ya que todo lo que se visita fue real y estuvo activo hasta 1915 con el cierre de la mina submarina.

En el pueblo de Arnao sigue habiendo patrimonio de la mina por rehabilitar como la Casona donde vivían los directivos de la mina y la escuela. La Casona fue vendida hace unos años para uso hostelero pero no se ve ninguna rehabilitación y tiene un aspecto muy abandonado. 
Por otro lado, la escuela cuyo edificio está cerrado, si se pueden visitar el patio de recreo de los niños que allí estudiaron. Era una escuela diferente a las existentes en aquellos años, ya que era mixta, es más la guía nos comentaba estaba mañana que posiblemente las primeras alumnas fueran niñas. El sacerdote encargado de su educación le daba una educación centrada en paseos, mapas de geografía y demás materias. Cuando visitas el patio puedes ver el el suelo unas especie de rayuelas en donde se explicaba de manera gráfica el abecedario, los números, la geometría, la geografía con mapas de Asturias, España y el continente Americano, como se puede ver en las imágenes que siguen.