domingo, 10 de julio de 2016

Festival de Cine Alemán Madrid

Llego bastante tarde para hacer una crónica de lo que vi y viví otro año más en una de las fechas más importante de mi calendario de ocio. Pero he tenido un fin de junio complicado con las muerte de mi ordenador. La solución no se demoró mucho en el tiempo, pero implicó la perdida de gran parte de mis cosas guardadas en el disco duro, los programas con los que trabajo. Intentar recuperarlos y a la vez seguir trabajando, vamos un lío morrocotudo.
Pero bueno, más vale tarde que nunca, intentaré acostumbrarme a hacer las crónicas como muy tarde dos días después de el hecho en sí.

Una vez explicado mi tardanza, me pongo con la crónica, que será breve, por el tiempo transcurrido más que nada.
Como hace unos cuantos años me suelo comprar el bono de tres películas y en esta ocasión en vez de comprarme la de la inauguración a parte, me compré la de la película muda.

La primera película que fui a ver fue: Fukushima, mom amour 
El día anterior había inaugurado el festival con presencia de la directora. Tocaba la sala grande y la estaba bastante llena para ser las 19:30 de un miércoles de junio. 
Me encantó, no me extraña que ganara el premio del público (al cuál se me olvidó votar :()
La película cuenta la historia de una chica alemana que se va a Fukushima como payaso para dar una nota de alegría a un lugar devastado no solo por el tsunami sino también por el desastre de la central nuclear. Allí se encuentra a una población mayor a la que no entiende y a la que parece que no tiene nada que enseñar, mientras ella está huyendo de su vida en Alemania, de sus errores de sus propios fantasmas. 
Fukushima, mom amour es una película de dos mujeres que se ayudan a luchar contra sus propios fantasmas a la vez que aprenden a entenderse dos culturas muy diferentes.
Ojalá encuentre distribuidor en España, por que es una de las películas de este 2016.

Al día siguiente, jueves 9 de junio, fui con mi amiga Lucía a ver He vuelto. Basada en el exitoso libro llamado de la misma manera. 
Película muy divertida y muy irreverente. 
Habla de que Hitler ha vuelto a 2014, creo que es, y su adaptación al mundo actual. Claro que al principio está totalmente desubicado y genera situaciones muy cómicas. La película trata de mostrar con la vuelta de uno de los seres más terribles del pasado siglo, como nuestros fantasmas ideológicos pueden volver y volver si no podemos medios para evitarlo. Todo desde un punto de vista cómico y paródico, pero con un trasfondo serio y terrorífico. Película recomendable para aquellas personas que entiendan que el humor se puede reír de todo, pero no de forma burlona, si no que nos muestran una realidad de forma distinta.

La tercera película que vi fue: Yo y Kaminski
Dirigida por el mismo director de Good Bye, Lennin, Wolfgang Becker, Yo y Kaminski narra la historia de un periodista bastante gilipollas, interpretado por Daniel Brühl, que quiere escribir la biografía del famoso pintor Kaminski. 
La verdad es que la película me pareció superflua y bastante floja, no llega arrancar en ningún momento, a pesar de que el principio es prometedor con la narración en plan NO-DO de quien es ese tal Kaminski que conoció a la flor y nata de la vanguardia pictórica.
Lo único que me gustó de la película fue transiciones que hacía de foto fija a cuadro y viceversa, a parte de los preciosos títulos de crédito. Donde hacía el mismo juego con cuadros famosos. Técnicamente impecables

Y ya por último, el sábado 11 de junio, la joya de la corona; Las tres luces de Fritz Lang con música en directo de la mano del Dj francés Rapaël Marionneau.
Vaya peliculón pudimos disfrutar. La sala grande estaba repleta.
Las tres luces cuenta la historia de una chica que pierde a su novio prematuramente y va al encuentro de la muerte para demostrarle que el amor es más fuerte que la muerte. Este le muestra tres historias para demostrarle lo contrario y en estas tres historias podemos ver la gran puesta en escena que realizó el director para cada una de ellas, donde se fijó en el más de los pequeños detalles para construir una historia entretenida. 
La primera historia tiene lugar en un país árabe, los carteles entre la escenas utilizan tipografías con tintes arabescos lo que hace que el espectador se involucre mucho más en lo que le están contando.
La segunda historia está ambientada en Venecia (con sus tipografías) y la tercera en China (con sus tipografías). Esta última es la mejor por los efectos especiales y por los tintes de comedia. 
Una vez contadas las tres historias la muerte da una oportunidad a la chica para que encuentre a alguien en el pueblo que quiera morir y así intercambiar su vida por la de su novio.
Interesante película que habla de los temas fundamentales que nos preocupan desde que el mundo es mundo. Imprescindible.